Tecnicismos
Pues bien, habiendo leído 3 de as ultimas obras de Daniel Warren Johnson, coincido en mucho con los que afirman que en sus historias hay un patrón que se repite. El protagonista es un personaje apaleado, que viene de una situación que lo dejo destrozado. En su regreso, lucha haya una revelación que le hará tomar una decisión, pero que no dependerá solamente de ellos, sino de la gente que le rodea.
Sea en Muder Falcon, Extremity, o en esta obra, se repite el tan den de Daniel al guion y dibujo y Warren Spicer al color. Funciona muy bien, la acción es trepidante, se lee del tirón y deja un buen sabor de boca. Con algunas escenas que son poesía visual, que no muestro, por no hacer spoilers. Pero que no dejaran a nadie indiferente.
El dibujo de Warren funciona muy bien, nos muestra una Wonder Woman sucia, con cicatrices y harapos que pese a no poseer todas sus fuerzas reparte mantecados como panes. La luz es algo más oscura en este comic, pero siguen con la misma paleta de colores que en sus otras obras. Los monstruos bien podrían ser intercambiables entre ellas pues se asemejan mucho. No así su origen.
Originalmente se publicó en tres tomos, que funcionaron muy bien, esta edición en cartoné es una delicia por el tamaño de las paginas y bien que se disfrutan.