Soziedad Alkoholika venían presentando el disco con el título más largo de la historia de la música, «Y ese que tanto habla, está totalmente hueco, ya sabéis que el cántaro vacío es el que más suena». Recuerdo estar medio acongojado en medio de la pista, rodeado de punks bastante más mayores que nosotros, y con cara de no muy buenos amigos. Eran otros tiempos…
Me encantaría recordar más detalles de lo que fué el concierto en sí, pero salvo contadas ocasiones, soy más de guardar en mi memoria la experiencia general de los shows en vivo, que detalles en sí mismos como si tocaron tal o cuál canción, la camiseta que llevaba el batería o el color del telón de fondo.
Y de este precisamente guardo un buen recuerdo. De lo que no estoy tan seguro es de si ese buen recuerdo es por la calidad instrumental de las bandas, los set-list de ensueño, o por lo que significó ese concierto como inicio de todo lo que vendría después…
Lo que si recuerdo, es a mi padre con su Opel Astra blanco, 2 esquinas más alla de la sala Zeleste en la calle Almogávers, para llevarnos a casa…Gracias papa!