Los suecos Highride acaban de publicar su nuevo álbum “Excellence & Decandece”, el segundo disco de la banda sueca, tras su debut del año 2013. Pero, el grupo no ha estado inactivo, sino que ha sido telonero de muchas otras bandas de su país como Crashdiet, Hardcore Superstar, etc. y algunas influencias de esos grupos se aprecian en este nuevo álbum.
Highride está formado por Peter Waljus (voz y guitarra), Kriss Keyes (bajo), Mille Lithander (guitarra) y Nicke Rossel (batería).
Entrando de lleno en el disco nos encontramos con "Superstarblind" con voces muy melódicas, estribillos y buenos riffs de guitarra. Típico hardrock sueco. Mientras que "Wonderland" suena más punk rock, en especial por la voz.
El siguiente tema "Red Light Rambler" tiene un cierto aire a Backyard Babies, en especial por el tratamiento de las guitarras. Muy divertido, parece hecho especialmente para los directos. De mis preferidos del disco.
"A Good Day (To Die)" tiene un muy buen solo y un coro pegadizo. Volvemos al punk-pop con "A Million In One". Siguiendo con ese aire punk-rock, aunque en este caso más en la onda americana, tenemos la canción “No Plan B”.
"Sex Is My Substitute" es una canción más dura y cañera, más Motorhead que Ramones. Puro rock and roll. Con “Sweet Driver”, pese a ser un buen tema, que cuenta con grandes guitarras, sus dos vocales y ciertas melodías vuelve a recordarnos en exceso a Backyard Babies. De la misma forma que "Demons By My Side".
El disco finaliza con “Drifting” tema con un inicio acústico, armónica y una bonita melodía que se electriza progresivamente.
Mis favoritas del disco son "Red Light Rambler", "Superstarblind", "Sex Is My Substitute" y "Drifting".
Buenos músicos, buenas canciones, bastantes melodías, un disco muy divertido, ameno de escuchar, pero no acaba de resultar del todo original. Creo que les falta encontrar su propio estilo, para que cuando escuches un tema, claramente lo identifiques con la banda. No voy a ser yo la que me queje de la nueva hornada de grupos suecos, ya que soy una enfermiza consumidora del hardrock y punkrock nórdico, por lo que he disfrutado del disco y mucho. Pero preferiría un poquito más de originalidad y diversidad.
¿Vosotros que opináis?. In Sweden we trust?.
