Demonical siguen fieles a su propuesta de metal de la escuela sueca, con el ya sexto disco en su carrera. Con bandas como Entombed o Dismember en mente, los suecos presentan a su nueva formación, tras perder al batería y volver Ronnie Bergerstål tras su salida en 2011, y también supone el debut del vocalista Christofer Sätderdal, que aporta más contundencia a su sonido. Temas intensos y agresivos con el gancho típico del estilo, destrozaran tu cerebro al ritmo de baterias poderosas y guitarras aulladoras, que se apoyan en los matices que aporta el sonido logrado en la producción, para conseguir darle grosor al conjunto.

Como muestras tenéis "Hellfire Rain" , "The Thin Darkness" o "Calescent Punishment" donde la fuerte afinación de las guitarras les da un toque especial a esos riffs distintivos y solo matadores. Temas brutales y agresivos, pero con ese punto de melodía que engancha en los coros y estribillos. "Aeons of Death" por otro lado, está más cerca del Groove, un tema algo más equilibrado dentro del caos, y "We stand as one" contiene algunos de los mejores riffs de todo el plástico,  y que aúna lo mejor de la vieja y la nueva escuela del Death Metal. "Victorius" es un tema épico, recordando a una marcha vikinga, y por ende a los grandes Amon Amarth. La sorpresa viene de la mano del "Slipping appart", donde por primera vez incorporan voces limpias, que van a cargo del vocalista de Astral Doors Nils Patrick Johansson, en una especie de "balada" que alterna partes más sosegadas, con otras más rugientes, aderezadas por unos buenos solos de guitarra. Una de las más destacadas, eso si, es la que abre el disco "My kingdom done", donde alcanzan el perfecto equilibrio entre su parte más abrasiva y la más melódica, con riffs cautivadores y ágiles, pero capaces de atropellarte.

Aunque hayan jugado un poco con el sonido de sus intrumentos, la esencia sigue intacta, consiguiendo unos temas pesados y aplastantes. Su lado oscuro sigue ahí, llevándoles por su vertiente más salvaje, incluso cuando desaceleran un poco. No revolucionará el panorama actual, pero es una manera de traer de vuelta a la actualidad, ese sonido que marcó una época hará ya un par de décadas, en el panorama extremo del Metal Europeo. Siempre han tenido su estilo, y aquí lo mantienen.