Autopsy lanzará su nuevo álbum, Ashes, Organs, Blood & Crypts, a través de Peaceville Records el 27 de octubre.
Autopsy, uno de los grupos de death metal activos más antiguos en la actualidad y una inspiración para generaciones enteras de depravados maníacos del metal en todo el mundo, se formó en 1987 en San Francisco (con el bateria y vocalista Chris Reifert originalmente formando parte del grupo de Florida que definió el género, Death), y lanzó cuatro álbumes en Peaceville Records, comenzando con el clásico debut Severed Survival en 1989, antes de disolverse en 1995, y los miembros formaron el igualmente perturbado Abscess.
Autopsy regresó oficialmente después de una pausa de quince años con el EP de 2010, The Tomb Within, seguido de cerca por su quinto álbum de estudio, Macabre Eternal en 2011, que los colocó en un nuevo camino sediento de sangre, con la intención revitalizada de crear más de los más enfermizos y música retorcida e intransigente que jamás haya aparecido en un tocadiscos, y la banda se ha mantenido prolífica desde entonces.
Inmediatamente después de la obra universalmente elogiada de 2022, Morbidity Triumphant, que también fue el primer lanzamiento que contó con el nuevo bajista Greg Wilkinson (a quien actualmente también se une Chris en el dúo de death doom Static Abyss), los grandes del death metal estadounidense ahora regresan para un nuevo sermón enfermizo, con Ashes, Organs, Blood & Crypts; brutales ataques de riffs marcados por el ataque salvaje del indiscutible maestro poeta de todo lo macabro, Chris Reifert.
Once pistas de puro ataque auditivo, puntuadas por frenéticos solos cortesía de los maestros de la guitarra Eric Cutler y Danny Coralles en medio de la clásica furia del death metal total que va directo a la yugular, intercalados con inquietantes descensos al delirio al estilo doom.
Ashes, Organs, Blood & Crypts fue grabado en Sharkbite Studios por Scott Evans y Greg Wilkinson, con seguimiento y mezcla adicionales realizados en los estudios Earhammer por Greg Wilkinson. El trabajo de masterización se llevó a cabo una vez más en Ken Lee Mastering.
Siguiendo con la tradición reciente, la portada fue creada por la mente morbosa de Wes Benscoter (Bloodbath/Slayer).
