Tal vez la próxima vez que os hagáis una analítica y el doctor os diga que tenéis anemia, os receta una escucha del primer disco de Vexed. Bueno, hierro no sé si tiene, pero metal tiene y mucho, y muy pesado. Los británicos debutan con este bulldozer metálico, tras publicar un par de singles independientes con anterioridad. El conjunto en si es devastador, con la rabia y la ira como hilo conductor, pero aprovechando la gran labor de la vocalista Megan Targett para darle versatilidad a las composiciones, alternando voces rudas con melódicas.
Unas sirenas de la polícia es la primera toma de contacto que nos ofrece el disco, con la intro "Ignorant", que da paso a un pesado y lento riff, que enlaza con el inicio de "Hideous", una auténtica losa de hormigón, con armadura de metal corrugado y corroído, que lacera tus tímpanos, hasta que Targett introduce las primeras voces limpias. La facilidad con la cambia de registro es ciertamente pasmosa, pero más allá de eso, queda perfectamente arropada por la banda, gruesa y firme en su sonido. La segunda parte del tema, con esas influencias industriales y djent son destructivas. El intrigante inicio de "Fake" da paso a más metal moderno, con aires de metalcore, pero lejos de ser una banda más. Megan escupe con rabia las letras, mientras la contundencia se apodera del tema, sin tener que tirar de velocidad o brutalidad. El dulce y melancólico arranque de la siguiente "Epiphany", se vuelve más metalcore cuando se oye el pistoletazo de salida. Este es un tema más reposado, con unas partes melódicas más insistentes y unos coros semi-orientales, que me recuerdan por momentos a los ucranianos Jinjer, sin acercarse a lo enrevesado de estos últimos. "Misery" es otro cuchillazo violento, con su machacante ritmo, alterado por momentos atmosféricos y más tranquilos. Y si la anterior era violenta, "Narcissist" es desquiciante, con esas progresiones de notas hipnotizantes, y la melodías vocales quasi-rapeadas en gutural.
La solidez del disco hasta ahora es alucinante, porque no pierde fuelle en ningún momento, y "Weaponize" no es una excepción. A continuación llega una de las más diferentes, que sirve para romper el ritmo del álbum con unas melodías más accesibles, como "Purity", con menos presencia de voces agresivas y más partes limpias en los estribillos radiables. Un interludio de título "Drift", nos lleva a la siguiente "Aurora", que profundiza el camino inspeccionado en "Purity", dándole más énfasis a la melodía que a la visceralidad, para cerrar con "Lazarus", otro castigo de puro metal con mucho groove, en el que resumen todo lo escuchado hasta ahora. Pesadez, insatisfacción, cambios de ritmo, agresividad y rabia.
Buena manera de aparecer en escena este "Culling culture", que mantiene al oyente atrapado de cabo a rabo, con ritmos de toneladas, un sonido con mucho cuerpo, y una líder que se hace con la banda sin remilgos. Estamos realmente ante una eclosión femenina en el metal, ya que personalmente veo más presencia de mujeres, y dan fé que son capaces de pasarle la mano por la cara a más de un machito. No me suena que haya sido parte de su cartel todavía, pero Vexed deberían tener un hueco en el Resurrection Fest, y no precisamente a la hora de comer.
Alex A.
PCDM.
Die-hard fan de Metallica. Degustador de todos los estilos, aunque con criterio.
Fiel seguidor de la saga Star Wars y de las aventuras de Son Goku.