Para los veteranos de la sala (que eran el 80%), el lema "T" from Texas, se asocia al rock sureño y a una de sus bandas estandarte. En el caso de Vandoliers, retoman ese lema en modo juventud y le aplican muchas más influencias, por supuesto las de su ciudad, pero también un toque irlandés, punk, algo de Hardrock y no tiene mido de cruzar la frontera y beber de ese aire mariachi que impregna buena parte de su música.

Con los ingredientes citados anteriormente y la entrega y actitud, montan una buena fiesta, donde sin darte cuenta te ves cantando himnos como "Sixteen Years" o moviendo la cintura emulando un baile Tex Mex, aunque te encuentres en plena "Eixample" barcelonesa y por supuesto no sepas ni como se baila esa música.

La entrega de la banda es intachable, se nota que tienen ganas y contagian al publico de ello, y aunque yo le hubiera dado un poco más de "punch" a la guitarra eléctrica, un martes cualquiera se convierte coo dice uno de sus himnos en "Every Saturday Night"y que sirvió para dar paso a un fin de fiesta con "500 Miles", el cover de The Proclaimers que sirve para un autentico desparrame, tanto encima coo debajo del escenario.

El bis arranca con versión en formato acústico del "Ruby Soho" vía Rancid, presentar nuevos temas y cerrar de forma potente un concierto cargado de ganas y actitud. La banda editará nuevos temas en agosto, estaremos atentos a ellos, porque por los que sonaron esa noche, todo apunta a seguir una línea ascendente.