Cuantas ganas de música en directo tenemos todos y cuantísimas ganas teníamos de ver a SOEN en directo desde hace ya muchísimo tiempo. Que día mas perfecto sino un sábado frio de diciembre, para poder ver uno de los bolos, de los que para un servidor estaría en el top 10 de los conciertos vistos en mucho tiempo. Y es que tengo que decir que la velada fue perfecta de cabo a rabo, sonido aplastante, teloneros que sorprendieron a todos y unos Soen que tienen una puesta en escena brillante y soberbia.

Bien que hicimos en ir puntuales a la sala Apolo para ver a los teloneros porque como he dicho antes fue toda una sorpresa ver las actuaciones Oceanhoarse y de Lizzard. Los primeros despertaron a todo el personal con su Hard Rock metalizado que divirtió de lo lindo a todos los que nos habíamos acercado antes para disfrutarlos, los finlandeses con un cantante muy enérgico ya pusieron la sala en calentamiento. Lizzard fueron sin dudarlo una grata sorpresa y ya con una sala casi a rebosar, el trío de franceses que hacen un metal progresivo seductor, se metieron a todo el Apolo en el bolsillo a base de dar un concierto super trabajado, que fue de menos a mas y coronándolo de manera magistral y poniendo a todo el respetable muy arriba con aplausos finales y todo.

El evento ya a estas horas, pintaba a noche mágica. Ya era el momento de que SOEN pusieran las cosas en su sitio, comienza a sonar una sirena para luego entrar con Monarch con un sonido imperial, ese sonido excelente no nos abandono en ningún momento. Ya desde el primer momento los suecos nos cautivaron con su sonido intenso y melódico a la par, algo precioso sin dudas. La puesta en escena es épica con un juego de luces excelente acompañada de lanzamiento de humo que engrandecía todavía mas lo que estábamos viendo.

Seguimos con Rival, de su aclamado Lotus, para darle un poco más de dureza y energía, para disparar a todos las personas que ya estábamos entregadas  y de que manera a Soen y de ahí pasamos a Deicever, la locura se apodero de la sala.
Los suecos tenían que bajar el arranque del bolo o no llegariamos vivos al final, con Lunacy, una canción con un sonido un poco más lento y tranquilo, nos consiguieron estabilizar, para luego dispararnos otra vez con Martyns con un trabajo a la batería y bajo brillantísimo que te adentran en el tema de manera magistral. La voz de Ekelöfse en todo el concierto fue simplemente perfecta, su voz me encandila y transmite muchísimo en directo, con ese aura progresiva, nos entusiasma y lo demuestra de sobras en la siguiente canción, la clásica Savia, con una batería dura y una alarde vocal excelente, todo muy delicioso y con mucha clase.

La sala salto por los aires con el trallazo de Lumerian de su ultimo disco. Temazo con ese estribillo que se te pega a la piel. Es oscuro y fuerte, es metal y suavidad. Es algo precioso y desde luego te pone las pulsaciones a mil. para ese momento ya estábamos toda la sala disfrutando de lo lindo, solo hacia falta mirar a la cara de la gente, estaban disfrutando como nunca.

Suena Covenant, toda unas maravilla progresiva con un trabajo de bajo y batería exquisito marca de la casa SOEN y que decir otra vez de esa voz maravillosa de Ekelöfse. Modesty y River con ese sonido y ritmos sutiles y preciosos nos baja las pulsaciones para emocionarnos de mala manera.

Volvemos al ataque con otro tema de Imperial, Antagonist. Otra de esas canciones marca Soen donde pasamos de ritmos frenéticos a suaves, donde Martin y su batería lo marcan todo y los demás estamos entregados a su excelencia.

Con Illusion, llega la elegancia con mayúsculas, ritmo armonioso, riffs y coros preciosos y dulces, nos ponen los pelos de punta y a flor de piel.

Y con esto se acerca el momento de los bises, con el ya típico amago de acabar el concierto. Nos lanzan Lascivious, tema de arranque suave y transición de medio tiempo, con aura melódica. Esto nos lleva a Sectarian con la gente totalmente enloquecida y todo el respetable dejándose llevar por los ritmos Soen y coreando todo el tema, para luego cerrar el concierto de manera mágica con Lotus quiero llorar de emoción no puedo decir nada mas.

Soen una banda reconocible, solvente, intensa, melódica y preciosa con una música que está al alcance de muy pocos. Y des luego todos los que pudimos asistir al concierto de Barcelona, guardaremos este concierto en nuestras mentes y corazones mucho tiempo.