Si algo hay que añadir como previa en esta review, es el buen ojo de unos currantes del metal como los amigos de Blood Fire Death, que tienen un ojo fichando bandas, que ni Monchi en el Sevilla. La cantidad de nuevas, y buenas, bandas que estamos descubriendo gracias a ellos, es insultante. Alguien debería proponer hacerles un monumento por el enorme trabajo que estan haciendo revitalizando y rejuveneciendo el panorama metálico estatal. En esta ocasión nos brindan la oportunidad de escuchar el debut de la banda de black metal barcelonesa Fogos, y oye, nada que envidiar a cualquier banda foránea. Emergiendo de las tinieblas hace poco más de un año, el combo deja de lado las grandilocuencias sinfónicas para grabar un disco crudo y visceral.

Ya desde la inicial "Acheron" podréis apreciar el asalto sin descanso al que os van a someter. Y sí, os vendrán a la cabeza las bandas pioneras del estilo de más pura esencia nórdica. Todo ese aire primitivo ya se deja palpar desde la portada, y lo que recoge el plástico, no le va a la zaga. Riffs hirientes y la sorprendente voz de Saten son sus principales bazas portadoras del fuego incendiario de su música, perfectamente capturado por un cada vez más reconocido Javi Félez. "Keres" profundiza algo más en su vertiente atmosférica por momentos, aunque el ataque es contínuo con la aplastante batería de Croma encendiendo todas las piras funerarias a su paso. La parte intermedia del corte, con ese parón con voces "limpias" antes del estallido recuerda totalmente a bandas como Marduk o Dark Funeral. "Dysnomia" entra a cuchillo con sus apenas 3 minutos de duración y sus cambios de ritmo, y da paso a la más extensa "Mortis", que sobrepasa los 7 minutos. Su duración ya nos hace intuir que estamos ante un corte diferente al resto. La lenta introducción, con riffs clásicos, nos sume en la oscuridad tenebrosa a las que nos conducen, para dejarnos ciegos ante sus asaltos, que nos sabremos por donde nos llegan. El ambiente opresivo crece en sus partes más lentas sin perder un ápice de la intensidad que nos han ofrecido hasta el momento. En "Khione" encontramos la colaboración a las voces de Sonia Chaves, que da inicio a otro ritual blackened inspirado en los maestros del género.

"Caronte" es puro black metal desquiciado, a todo trapo y sin florituras. Unos denominadores que comparte la siguiente composición, "Exis", aunque con el añadido de tener unos cambios de ritmo bestiales que te pillan por sorpresa. En esta segunda mitad del disco, no encontramos grandes experimentos, pues "Nyx" y "Deimos", no se alejan demasiado del sonido presentado en las dos anteriores. Para la final "Eidolon" dejan otro veloz tema de black metal oscuro, putrefacto y vicioso, con un extra de epicidad, con el que dejarnos empachados.

Mentiríamos si dijeramos que Fogos inventan la rueda, porque ni lo hacen ni creo que lo pretendan. No váis a encontrar originalidad en sus temas, pero este disco está a la altura de joyas de muchas viejas glorias venidas a menos, que siguen sacando discos bastante medianeros. Hay aquí más esencia de lo que parece en una simple y primera escucha. Si lo tuyo es lo más trve, es el momento de desempolvar tu corpsepaint y hacerte con este disco.