Casi 10 años ha tardado la banda barcelona ReDimoni en volver a pisar un estudio para traernos nuevos temas. En esta ocasión, un EP que han grabado en Moontower Studios, con portada de Aitor Cano Zubiaurre y diseño de Irene Serrano. La banda siempre ha tenido algunos vaivenes en cuánto a formación, pero parece que han conseguido estabilizarlos, y una vez han sentido la energía necesaria para asaltar de nuevo la escena, así lo han hecho. Tras debutar hace ya más de 15 años, y con varios lanzamientos a la espalda entre LP's, maxi's, splits y EP's el thrash metal vuelve a adueñarse de la escena nacional, y quizá haya sido el empuje necesario para traernos de vuelta a la mítica banda. De entrada, hay que mencionar que los cambios no parece haber repercutido en el enfoque germano de su música, a la estela de bandas como Kreator, Sodom o Destruction, y que el sonido que han conseguido es cristalino.
El primero de los cinco temas que vamos a escuchar es "As the soul leaves the body", con el que acompañaron el anuncio de su vuelta. El riff inicial es absolutamente demoledor y la producción no hace más que sumarle potencia e intensidad. Aplastante ataque percutor por parte de todos, con la chillona y estridente voz de Cesc. Con este single queda patente que no vuelven para darse un paseo, si no para dar todo lo que llevan dentro. Si la anterior te ha parecido agresiva, espera a escuchar el desenfreno de "Death shall come to us all", a tope de revoluciones, y con algunas secciones rompe-cuellos con guitarrazos meramente sublimes. Todo está executado con mucha maestría y eso se nota en el resultado final. En otra línea va "Der tag der rache", más oscura y progresiva en algunos momentos, con Alex machacando los parches y el bajo de Alex R perfectamente apreciable. Igualmente destructiva, pero sin focalizar en exceso en la velocidad. Más machacona es "Ancient buried secrets", a la que David va añadiendo detalles de su guitarra en diferentes partes del tema. El EP lo cierra "Axes", que explota en tu cara tras una pequeña intro". Violenta, rabiosa y enfurecida, con algunos destellos de melodía y que acaba dejando un muy buen sabor de boca a todo lo que hemos escuchado.
Tengo que reconocer que en algunos momentos me cuesta digerir por completo la voz de Cesc, pero su trabajo es encomiable y no empaña el resultado final. Cinco temas que pasan en un suspiro (es lo malo de los EP's...) y que puedes dejar un rato en "repeat" hasta que tu hambre de thrash quede saciada. Si alguna vez en este país tuviéramos un Big Four, desde luego ReDimoni estarían entre los más firmes candidatos.
