Estamos acostumbrados a que en el mundo del fútbol los gustos musicales de sus protagonistas sean inversamente proporcionales a su calidad como deportistas. El Athletic Club de Bilbao siempre ha sido un club especial y diferente en muchos sentidos (los no futboleros tirad de Wikipedia, que si no esto se puede hacer muy largo). Y en esta ocasión no podían defraudarnos tampoco y rendirse al último reaguetoneo, gitaneo o trapeo que esté de moda en ese mundo paralelo en el que habita la mayoría del país.
Por ello seis aguerridos chavales de la plantilla (Asier Villalibre, Mikel Vesga, Mikel Balenziaga, Dani García, Óscar de Marcos e Íñigo Lekue) decidieron celebrar la consecución del título de la Supercopa de España, el primero en muchos años de sequía, interpretando en el hotel donde se encontraban alojados una versión del mega clásico "Highway to hell" de los australianos AC/DC. No entraremos a juzgar la calidad de la misma. Al fin y al cabo estos polluelos se ganan la vida dándole patadas a un balón, pero quede constancia de su atrevimiento y hágase verdad más que nunca aquello de que la intención es lo que cuenta.