La nueva miniserie de Netflix de Ryan Murphy, Hollywood, productor de series como Feud, American Horror Story, Pose o Glee, navega entre la realidad y la ficción, mezclando personajes e historias reales, con personajes ficticios, como es el caso de Jack Costello, su protagonista. Con una estética a lo James Dean,este chico intenta abrirse camino en la industria del cine cueste lo que cueste.
La historia se centra en un grupo de jóvenes, entre ellos Jack, que tendrán que luchar contra el racismo, la homofobia, las injusticias, los clichés y el poder de la industria, para conseguir su anhelado sueño de triunfo en la edad de oro de Hollywood. Todo entrelazado con la historia real de Peg Entwistle, una actriz británica que se suicidó lanzándose de la letra H de Hollywoodland.
Nos muestra cómo ha sido la meca del cine, con personajes repulsivos y deleznables como el que interpreta Jim Parson y con héroes, como el personaje que interpreta Patti LuPone,representando el empoderamiento femenino.
La estética es realmente maravillosa y te preguntas porqué no seguimos vistiendo así de bien. La trama tiene su gracia aunque va perdiendo fuerza por el camino y al final es todo muy previsible, pero son 7 capítulos de una serie diferente como las que hace Ryan Murphy, que, o te gustan, o las odias.
Darle una oportunidad aunque solo sea por la estética y luminosidad y la gracia de no saber qué es real y qué no…¿es cierta la historia de la gasolinera? Mírenla y entreténganse jugando a los detectives.
